Lo has vuelto a hacer. Prometiste que no lo harías pero has caído de nuevo en la vorágine del consumismo. Dijiste que ibas a reducir las compras de Navidad y Reyes pero no lo has conseguido. Fuiste al mercado, a las tiendas y no refrenaste tus ganas de comprar y ofrecerle a tu familia lo mejor de lo mejor.
El mejor marisco, el mejor pescado, las carnes más exquisitas, el mejor vino de la mejor denominación de origen. No te faltó ni dar el aguinaldo ni hacer los mejores regalos de Reyes Magos. Y si eres de las que también celebra la llegada de Madrid no te faltó ese pequeño detalle.
¿Y ahora qué? Pues ahora toca lidiar con la temida cuesta de enero, pero no te queda ni un euro. Y encima le estás dando vueltas a que querías comprar tal o cual prenda porque estamos de rebajas y no te llega.
Bueno. Pues aquí hemos pensado en algunos consejos para que te sea más liviano este peso que te acaba de llegar. Vamos a ver si los pones en práctica y superas con éxito esta etapa tan complicada.
1. Siéntate y planifica
No te queda otro que planificar. Te tienes que sentar en la mesa de pensar y ver como estás de ingresos y gastos. Si los segundos superan a los primeros, tenemos un pequeño problema. Pero que no cunda el pánico. Elabora un presupuesto y mira qué es lo que puedes gastar.
Tienes unos gastos fijos a los que debes hacer frente y unos gastos variables que con un poco de esfuerzo podrás eliminar. Se trata de identificarlos y ver cuáles se han de eliminar. Si una temporada te quedas sin televisión por cable, pues ¿qué le vamos a hacer?
Reúnete con tu familia y hazles ver que ellos también han de colaborar. No vale en estos tiempos de cuesta de enero a dejarse las luces encendidas del hogar por doquier ni a andar en manga corta en pleno invierno por la casa. Reduce el consumo de luz todo lo que puedas.
Lo que está claro es que no vas a poder gastos necesarios como la alimentación, pero sí el consumo de luz. Un buen consejo es sustituir todas tus bombillas por bombillas led de bajo consumo. Estas son un poco más caras al principio pero al final de la contienda resultan más rentables. Por no decir que las bombillas led le hacen al medio ambiente un buen favor porque están fabricadas con materiales menos tóxicos que las tradicionales.
2. Paga en efectivo
Puede constituir un trauma pero verás qué bien te viene. ¡¡¡SEPÁRATE DE TU TARJETA DE CRÉDITO POR UN TIEMPO!! No es broma. Y no te pasa a ti sola. El ir pagando con una tarjeta de crédito da la sensación de que el dinero no se agota nunca. Si estás leyendo estas líneas habrás comprobado que esto no es así.
Pagar con dinero en efectivo te va a ayudar a controlar el gasto, sin ninguna duda. A partir de ahora ve a tu cajero automático y auto asígnate una cantidad y hazte el firme propósito de no pasarte de ahí.
Esta recomendación es realmente útil sobre todo en el mes de enero, para no caer en tentaciones. Pasearás y pasearás por las calles y verás cientos y ciento de carteles con unas letras en blanco bien grandes que anuncian ¡¡REBAJAS, REBAJAS!! Si tienes el dinero en efectivo resistirás mejor la tentación.
3. Haz compras con lista
Cuando vayas al supermercado a hacer la compra semanal no vayas si no tienes una lista previamente confeccionada en la soledad de tu hogar. Revisa todos los armarios, dale un vistazo a la nevera y a la despensa y apunta todo lo que realmente sea necesario. Verás como de esta manera no “entran” al carro de la compra productos que no necesitas.
Por cierto, que los supermercados y grandes superficies son muy “cucos” y periódicamente cambian los productos de los lineales con el objetivo de que tú tengas que pasear durante más tiempo por los pasillo. A más tiempo que estés en los supermercados mayores compras se realizan y esto lo saben muy bien los directores de marketing de los grandes supermercados. Es otra razón más para que vayas a comprar con una lista en la mano y no te apartes de ella ni un ápice. ¿Estamos de acuerdo?
4. Compra online y compara precios
También está demostrado que comprar online reduce tus gastos. Es sencillo de explicar. Estás tranquilamente en tu casa, sin que nadie te dé prisas. Con tu ordenador o con tu tablet puedes recorrer cientos y cientos de tiendas online sin que se te hinchen los tobillos de tanto andar. Puedes comparar cientos y cientos de precios hasta encontrar los más baratos y pedir que te los lleven cómodamente hasta tu casa.
La compra online se ha convertido en un importante ahorro. Y no sólo debes pensar que los comercios electrónicos están pensados para que compres productos tecnológicos o calzado o ropa de mujer. También puedes hacer la compra más básica y que te la lleven a tu casa. Haz la prueba que nos lo agradecerás.
5. Y a partir de ahora, ahorra
Vale. Ya has pasado el trago. Estamos más que seguros que has salido adelante aunque te hayas tenido que apretar el cinturón. ¿Qué hacer para que no te vuelva a pasar? Pues muy sencillo. Un buen consejo es coger un poco de dinero y apartarlo cada mes para hacer frente a los gastos de la próxima Navidad. Así no te verás agobiada en enero. Y, de esta manera, seguro que te puedes dar un capricho en las rebajas. Aunque estemos subiendo la pendiente.
Y ahora una pregunta: ¿eres una mujer precavida o te las pasas canutas en la cuesta de enero? ¿Qué plan sigues para salir de los agobios económicos? Dínoslo en los comentarios.
Y si te ha gustado este post y crees que le puede venir de maravilla a una amiga que está en la misma situación, no dudes en compartirlo.
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